Carta a Héctor
A todos los Héctor y Juancho
Querido Héctor:
Hoy hemos recibido tu última carta. Nos encanta el dibujo que nos mandas y nos alegra muchísimo que estés tan contento con la escuela y con los libros y el material nuevo que tenéis ahora.
No nos cuentas nada de tus hermanos y nos gustaría saber cómo están y si a los otros que van a la escuela les gusta tanto como a ti. Ellos son aún muy pequeños para escribir y tienes que hacerlo tú en su nombre.
Loli nos pregunta mucho por ti. Como solo tiene cinco años, aún no entiende que estés tan lejos y cuando le damos alguna golosina, guarda un poquito para dártelo, claro que luego no se acuerda y se lo come.
En la próxima carta te vamos a mandar una sorpresita: Vas a tener otro hermanito aquí, en España, y entonces te enviaremos nuestra foto de toda la familia. La madrina Paula, la hermanita Loli, el padrino Ángel y el nuevo hermanito que se llamará Juanjo.
Hoy también te mandamos un paquete con una máquina de fotos para que tú nos envíes la fotografía de tu familia. Ya sabes que te conocemos por el retrato que nos enseñaron cuando pedimos ser colaboradores, pero no nos dieron copia.
Estamos deseando conoceros a todos y lo que más nos gustaría es poder ir a veros en persona, pero el viaje es muy caro y, de momento, no podemos pagarlo.
¿Sabes una cosa? Ya escribes muy bien, se nota de carta a carta lo mucho que estás aprendiendo en muy poco tiempo. Se ve que eres un niño muy inteligente y trabajador y quisiéramos que, cuando seas mayor, pudieras hacer el trabajo que más te gustase. Aunque ahora tengas que rebuscar entre la basura para ayudar a tu papá y a tu mamá, estamos seguros de que en el futuro podrás ser mecánico de coches como dices que te gusta tanto.
Te mandamos muchos besos y esperamos impacientes que nos mandes tu siguiente carta contándonos más cosas de tu poblado, de tus hermanitos pequeños y de la escuela. Cuídate mucho.
Tus padrinos, que te quieren.
La siguiente hoja es para tu papá:
Sr. Juancho:
Sabemos que su situación es muy problemática y estamos seguros que, algunas veces, el desánimo e incluso la desesperación le apretarán el alma.
Nosotros también somos padres y, a pesar de que nos ha tocado vivir en un país diferente y hemos tenido la suerte que a Vd. le ha faltado, creemos saber, o al menos imaginar, el sufrimiento que padece cuando mira hacia el futuro de sus hijos.
Cuando decidimos hacernos colaboradores, nos enseñaron muchos casos similares, pero fue el suyo el que nos encogió el corazón y nos impulsó a hacer lo que estuviera en nuestras manos. Nosotros, ya sabe, no somos una familia rica, pero seguiremos cooperando mientras nos sea posible. Ojalá pudiéramos hacer mucho más y no solo por su familia; pero aquí tampoco es un camino de rosas y, aunque de diferente manera, también tenemos necesidades.
Seguimos buscando un trabajo para Vd. pero está difícil de encontrar, casi todo lo que hay es provisional y lo que necesita es un trabajo fijo para poder hacer los papeles y quedarse definitivamente. Si se decide a venir a España, no se preocupe por los gastos del viaje, ya buscaremos alguna solución para que pueda venir aunque sea Vd. solo. Ya podrá mandar luego dinero a su familia para que vengan también.
No tenga miedo por dejarlos solos, su esposa, la señora Joaquina, cuidará de ellos bien, ya lo sabe. Estamos seguros de que las cosas mejorarán poco a poco y, en menos tiempo de lo que se piensa, podrá hacerlos venir a todos.
Anímese Sr. Juancho, Héctor y toda su familia merecen cualquier sacrificio para alcanzar una oportunidad y Vd. sabe que, desgraciadamente, en su país no la van a encontrar.
Un abrazo muy fuerte para todos.