Adultos

Para los que empiezan a olvidar que fueron niños.

Durante la vida se producen infinidad de situaciones que pueden angustiarnos pero que, por norma general, nos suelen enseñar una salida que antes no veíamos.

Una actitud optimista nos ayudará a sobrevivir a las pruebas que nuestro paso por el mundo nos depara, es evidente que será mejor vivir contento que atemorizado por el devenir; pero ni tan despreocupado como la cigarra ni tan obsesivo como la hormiga. Digamos que hemos de ser conscientes de la problemática de la vida aunque, encarándola de forma positiva, podremos resolverla mejor o, al menos, seremos más felices.

Es el equilibrio del Yin y el Yang, de lo bueno y lo malo, de lo que elegimos y lo que nos viene dado como sello de la casa.

En algunos de los escritos que se recogen en este apartado intento mostrar el descarnado lado de la vida; pero buscando ese ápice de esperanza que siempre hay detrás, si lo sabes buscar.

Me hubiera gustado poder dar una visión más amable en general; pero creo que sería faltar a la verdad omitir la parte oscura que está ahí y que nos toca vivir, queramos o no.

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